El Síndrome de la Boca Ardiente (SBA) y sus posibles causas

El Síndrome de la Boca Ardiente (SBA) y sus posibles causas

Seguramente, lo has sentido alguna vez, pero siempre lo hemos asociado a estar en contacto con un alimento muy caliente, como el agua, el café, el té, una sopa… Se trata de una sensación de dolor y molestia que se produce cuando la lengua, las encías o el paladar está en contacto con ese alimento caliente y se produce una ligera quemazón en las partes blandas. Pero hay ocasiones en las que se tiene una sensación similar pero no hay una causa objetiva para sufrir esas molestias.

Se trata del Síndrome la la Boca Ardiente y puede tener varias causas. Para tener un diagnóstico claro, nada más se tiene esta sensación de forma persistente y sabiendo que no hay un motivo objetivo, hay que acudir al especialista para determinar qué lo provoca. Una visita al dentista puede ofrecer una imagen clara de lo que la produce. El profesional podrá deteminar si hay una causa relacionada con los dientes, que produzcan roces u otros problemas que causen el dolor.

La revisión dará al dentista toda la información que necesita para determinar el origen del dolor. Si no se detecta ninguna causa relacionada con problemas que pueden surgir en el ámbito del terreno que domina el dentista, es posible que se trate de otros problemas que escapen a sus competencias. De todas maneras, podrá orientar al paciente y aconsejar visitar a un especialista que pueda solucionar el problema.

El Síndrome de la Boca Ardiente (SBA) o estomatodinia, como también se llama a este problema, puede estar causada también por motivos médicos, relacionados con la falta de alguna vitamina o nutriente. Al ser un síntoma que se suele percibir por parte de las mujeres de mediana edad, también se relaciona con la aparición de la menopausia, por lo que debería tratarse por el especialista correspondiente.

Hay que conocer bien la causa, porque puede ser un síntoma de otra enfermedad y puede resultar útil para diagonosticarla y comenzar a tratarla. De todas maneras, hay que descartar cada problema a medida que va surgiendo y la visita al dentista puede ser una buena manera de comenzar a descartar o confirmar cosas.