Las personas mayores y el cuidado de los dientes
A medida que crecemos, los dientes también experimentan cambios importantes. Esto hace que sea más importante cuidar de ellos, ya que pueden sufrir más enfermedades y problemas. Estos cambios pueden pasar por la reducción de los nervios, haciendo que sea más difícil notar cuando se produce una caries y tardar más de lo normal en notar que existe un problema.
Este es solo uno de los problemas que se pueden encontrar en una persona de avanzada edad. Las encías también pueden retraerse y son más sensibles a los efectos de las bacterias, que aunque no atacan de manera más agresiva, pueden provocar mayores daños en ellas. Todas estas cosas se han de tener en cuenta cuando se cumplen los 60 años e incrementar el cuidado de los dientes y encías.
Si la salud dental es buena, puede ser que no afecte demasiado y se mantenga en buen estado, pero aún así, hay que ir cambiando las costumbres de la higiene dental para adecuarla a las nuevas circunstancias. Es importante hacerlo con los consejos del profesional, ya que este podrá realizar un buen diagnóstico del estado de la boca y recomendará la mejor forma de realizar la limpieza dental a partir de ese momento.
Normalmente, debido a que las encías son más sensibles a partir de los 60 años, recomendará el uso de un cepillo dental de cerdas suaves, para hacer menos presión sobre ellas. También puede sugerir el uso de productos que las fortalezcan y haga que sean más resistentes a la acción de las bacterias.
Hay que tener más cuidado también con la alimentación, ya que hay alimentos que hasta el momento no han provocado molestias, pero que pueden hacerlo. Aunque si no existe un motivo concreto no hay que hacer grandes cambios en los hábitos de limpieza, sí que hay que extremar la preocupación. Si las piezas han llegado con nosotros a esa etapa del camino, no hay motivos para que no continúen con nosotros, ¿verdad?