Limpiar el espacio entre dientes… ¿usamos palillos?
A todos nos ha pasado. Comemos un buen plato de carne, y de repente, al terminar, nos encontramos con una pequeña molestia en los dientes. Se trata de un trozo de comida retenida entre los dientes y que resulta sumamente molesta. Lo que en la calle se llama “un paluego“, vamos. El instinto nos hace, primero, querer retirarlo haciendo presión con la lengua, pero esto no suele surtir efecto. No tiene bastante fuerza.
El segundo intento se realiza con un palillo de madera, el conocido y castizo mondadientes. Pero aunque la tradición nos dicta que es lo que necesitamos para retirar esos restos, es aconsejable no hacer uso de ellos. Se trata de un pequeño trozo de madera, que pese a su conocida efectividad, puede provocar más daño que soluciones saludables.
El uso de los mondadientes o palillos está totalmente desaconsejado
Los palillos son bastante resistentes y sólidos, algo que pensaríamos que puede ser muy adecuado para retirar los restos entre los dientes. Pero esa misma resistencia puede provocar serias lesiones en los dientes, rompiendo el esmalte y haciendo que se produzcan daños en el mismo.
Además, al terminar en punta es un riesgo utilizarlos en el espacio interdental. Puede causar heridas entre los dientes, clavándose en las encías y provocando sangrados que pueden resultar muy dolorosos. No es nada aconsejable utilizar este tipo de instrumentos, así que te vamos a ofrecer otras alternativas.
Una de las mejores es el hilo o la seda dental. Este permite eliminar los restos de comida entre dientes sin causar daños ni provocar heridas en ningún caso. Se puede llevar un pequeño estuche de hilo dental encima y utilizarlo en cualquier lugar, tras la comida.
Obviamente, no es nada agradable hacer uso del hilo dental en la mesa, pero con retirarse un poco hasta el baño, es suficiente. El palillo se puede utilizar en la mesa y no resulta nada bueno para los compañeros de comida. El hilo dental puede arrastar estos restos sin causar daño y es la manera correcta de limpiar ese espacio tan delicado.
Además, una vez en casa se pueden utilizar los cepillos interdentales, que son más eficaces y que permiten una limpieza más eficiente. Después, siempre hay que cepillarse los dientes para eliminar el sarro y dejar los dientes perfectamente limpios. Si se utiliza después un colutorio, siempre se mejora la higiene y la salud dental. ¡No lo olvides!